Sin duda, el SEO y el SEM son amigos, pero de esos que, aunque pueda parecer lo contrario, tienen el afamado “derecho a roce”.

Un consultor SEO lo tiene claro, sabe que su trabajo no está reñido con el que desarrolla el especialista Google Ads. Sabe que todo suma, que juntos son más fuertes.

No sé si es por la similitud de las siglas, o porque cualquier otra razón, pero mucha gente aún sigue confundiendo de qué va cada asunto; por ello, les pongo brevemente el significado de cada acción:

SEO (Search Engine Optimization)

Se trata del posicionamiento natural en buscadores, es decir, “gratuito”, y pongo gratuito entre comillas porque seguramente convenga invertir en un profesional que lo haga de la mejor de las maneras, pero por el que no hay que pagar a Google.

Es pues un conjunto de acciones que se desarrollan de manera orquestada, con el objetivo de conseguir que el recurso web que estén intentando posicionar, esté lo más alto posible en los buscadores.

Ya saben esa frase que dice:

“El mejor lugar para esconder un cadáver… es la segunda página de Google”

SEM (Search Engine Marketing)

Hablamos ahora de acciones de pago, es decir, campañas y promociones (a modo anuncio) que realizaremos en los buscadores. Estas estrategias de marketing en buscadores logran, al igual que el SEO, posicionar sus páginas webs, eCommercer, etc. pero “a base de talonario”, seleccionando keywords específica, pujando para obtener mejor resultado, etc.

Explicado muy por encima los conceptos, permítanme que les cuente 3 diferencias entre SEO y SEM:

  • Inversión: en el SEM se paga directamente a los buscadores de turno, es decir, bien por aparición o bien por click, las campañas que desarrollen tendrán un coste directo. Por otro lado, en el SEO, el posicionamiento será natural, es decir, a través de ciertas metodologías profesionales previas, el consultor logra que el recurso (web, blog, eCommerce, etc.) esté bien posicionado; en este último caso, sin dinero de por medio.
  • Prontitud: el SEO no es inmediato, es decir, costará algún tiempo que esos recursos que apuntaba ut supra puedan obtener un puesto notable. Sin embargo, el SEM, al ser “pagado”, obtiene resultados de aparición inmediatos.
  • Medición: en el SEM se puede monitorizar mucho mejor, sabrán presupuesto, qué keywords están funcionando mejor, segmentar geográficamente, por público, por páginas… El SEO tendrá más difícil esta tarea, ya que los resultados que arroja serán más complicados de relacionar, y además, serán más ambiguos.

Como reza el título de este artículo, el SEO y el SEM deben tener “derecho a roce”. Soy de los profesionales que piensa que juntas son más fuertes. Pero es como todo, hay gente a favor y en contra.

Quienes apoyamos que sean campañas paralelas, nos basamos básicamente en que proporciona más caminos para que ese tráfico llegue al site.

Por el contrario, hay quién piensa que únicamente se debe hacer una u otra estrategia; sin duda, si están bien hechas, obtendrán resultados, pero juntas, con ese roce… esos resultados serán mayores.

¿Y ustedes…? ¿Qué prefieren? ¿Juntas o separadas?

Un saludo.

Rayko Lorenzo.